Por Benjamín Arias Acosta
Reflexionar sobre un tema en específico es muy complicado. Porque
existe la posibilidad de ser etiquetado como parte de los que están a favor o
de los que no. Es cuestión de polaridad.
Sobre la solicitud al Congreso la Ley de Protección a Personas
Defensoras de los Derechos Humanos y Periodistas porque "su espíritu fue
el de violentar la libertad de expresión y el derecho a la información, además
de restringir la labor periodística", debo establecer un MARCO LOGICO que
en cualquier sitio de la Internet y bibliografía se pueden corroborar.
1.- Los Tratados Internacionales en los que México forma parte y
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, son la base
fundamental de donde se originan las demás leyes aplicables en lo general y las
Leyes de los Congresos Locales se derivan de éstas, se tropicalizan y se
aplican en lo particular.
2.- La Defensa de los Derechos Humanos y el Periodismo, libertad
de expresión así como el derecho a la información son las actividades que
“desordenan la gobernabilidad”.
3.- La “gobernabilidad” es la zona oscura por la que transita un
gobierno con el objetivo de mantener el orden ante circunstancias que amenazan
al Poder Ejecutivo. Así que, cuando se ejercen y se extralimitan en las
acciones de gobernabilidad, existen fundamentos para defender los Derechos
Humanos y tener acceso a la información por parte de ambos entes. Mismos que se convierten en “objetivos de
control” para la “gobernabilidad” y la oscuridad se hace mas grande.
4.- Los dueños de los medios de comunicación masiva, por aire y
tradicionales de papel, entienden y alientan la “gobernabilidad” a través de
los “convenios de publicidad” y se sienten parte de la solución, pero coartan,
coptan y lesionan los derechos humanos y los derechos a la libertad de
expresión y del derecho a la información de sus trabajadores más que nadie los
de a pie. Por lo tanto, no existe un periodismo completo.
5.- El temor fundado a ser despedido por “no convenir a los
intereses ni a la política de la empresa” somete y amordaza desde adentro al
reportero, dejando al último y mas importante eslabón de la cadena informativa
con una “verdad a medias” y eso consume, eso le hacen creer, así lo manipulan.
6.- La información oficial es la que debe dar certeza al ciudadano
que el gobierno está cumpliendo con su cometido con hecho y no con palabras.
7.- Desapariciones forzadas, ejecuciones, “ablandamiento de las
plumas”, control de daños, amenazas de muerte, “cañonazos”, “embutes”,
“calentaditas”, restricciones, secuestros, despidos y otros mecanismos de
“gobernabilidad” se activan desde dentro para tranquilizar a los periodistas
rebeldes, freelancers o independientes, o de medios nacionales e
internacionales.
8.- Todo lo anterior exige una legislación que proteja a estos
genuinos defensores, pues como podemos observar es una labor de alto riesgo
para ser víctima.
9.- De convertirse en víctima, toda la familia sufre las
consecuencias, sobre todo los hijos, de haberlos, los padres, la pareja, que deben
ser tratados de manera especial por el Estado.
10.- Entonces La Ley de Protección debe ser abarcar lo más posible
en lo general y muy específica en lo local, mas allá de egos y vanidades. Mas
bien debería llamarse Ley de Prevención, Atención y Protección de Personas
Defensoras de Derechos Humanos, Periodistas y Acceso a la Información.
11.- También los Defensores de los Derechos Humanos, pero sobre
todo los periodistas se deben organizar, juntos pero no revueltos, en un
Colegio, Barra o Aerópago que incluya una Fundación Especializada para la
Atención a Víctimas e Hijos de Víctimas de Personas Defensoras de los Derechos
Humanos y Periodistas. Juntos o separados pero atendidos.
Nota final.- Si lo vemos fríamente, de cumplirse las funciones
públicas con todas las de la Ley, no haría falta ninguna protección. Y ese… es
el Estado del Arte en nuestro México lindo y querido!
Muchas Gracias Por Leerme!